BlogCulturaGastronomía

La Ruta del Cacao

Estarás de acuerdo en que comer chocolate es uno de los mayores placeres. Si quieres saber más sobre esta exquisita y aromática delicia, conoce algunas de las plantaciones y haciendas que podrás visitar en la Ruta del Cacao, en el municipio de Comalcalco, muy cerca de la capital tabasqueña. 

Hacienda La Luz

Considerada una de las más importantes de la región, originalmente fue una hacienda cañera. En la década de 1930, el doctor alemán Otto Wolter adquirió la propiedad, convirtiéndola en una de las pioneras en la producción e industrialización de cacao. Ofrece tours de martes a domingo (los lunes solo con previa reservación) en donde además de recorrer una plantación, la bodega, la fábrica y una parte de la hacienda, podrás participar en un taller de elaboración de chocolates o disfrutar de una cata-maridaje guiada por un chef.

Hacienda Jesús María

Abierta de lunes a domingo, este lugar es como viajar al pasado. Pues, aunado al recorrido por las fincas cacaoteras y los viveros experimentales, te adentrarás a la cocina, costumbres y tradiciones locales visitando la Casa Antigua (con su exposición de trajes regionales), la Casa Maya Chontal (que da cuenta de cómo vivían los peones de la antigua hacienda), la fábrica y tienda en las cuales verás de cerca el proceso de elaboración y, de paso, adquirir su chocolate artesanal.

Finca Cholula

Al igual que las Haciendas La Luz y Jesús María, esta propiedad familiar (ubicada a pocos metros de la zona arqueológica de Comalcalco y reconocida por su orientación orgánica), ofrece diariamente recorridos guiados por sus plantaciones de cacao, además de visitas a su fábrica productora El Chontal y su tienda de artesanías y chocolates.

Hacienda La Campesina

Un lugar muy especial (abierto diariamente) surgido a raíz de la idea de Estela Lázaro quien, inspirada en la dedicación de su madre y abuela por el cacao, fundó hace poco más de diez años una cooperativa de mujeres llamada “Embajadoras del cacao”, donde todas saben desde plantar cacao hasta procesarlo en barras o bebidas, aprovechando además parte de la merma para fabricar originales productos artesanales. Preservar la tradición cacaotera es el objetivo principal de este colectivo, que al día de hoy integra a alrededor de 60 familias de la localidad.

Deja una respuesta